Chile inaugura su pabellón en la 60° Bienal de Arte de Venecia con su proyecto sobre identidad y diáspora
“Cosmonación”, de la artista Valeria Montti, se compone de cinco obras que invitan a reflexionar sobre los debates contemporáneos en el encuentro de artes visuales más importante del mundo. La curatoría estuvo a cargo de Andrea Pacheco González.
“Cosmonación”, de Valeria Montti Colque, es el proyecto que exhibe Chile en la Bienal de Arte de Venecia 2024. Con la curatoría de Andrea Pacheco González, la propuesta se compone de cinco obras que invitan a reflexionar sobre los conceptos de nación, exilio, migración y diáspora como parte de los debates contemporáneos que abordan las identidades múltiples y desplazadas. Así, nuestro pabellón se conecta con la temática central de la Bienal: “stranieri ovunque” (“extranjeros en todas partes”).
Nacida en Estocolmo, Suecia, en 1978, Montti Colque pertenece a la generación chilena que nació en familias rotas por el trauma del exilio. Creció en las afueras de Estocolmo, en un municipio que, a mediados de la década de 1990, acogía a una diversa comunidad de desplazados de diferentes continentes. Esta forma de vida y convivencia social ha alimentado su obra desde el inicio de su carrera. En sus acciones, dibujos, murales, esculturas o instalaciones, abundan entidades no identificables en constante tránsito, siempre yendo hacia algún lugar.
"Mamita Montaña”, la pieza central de la obra de Valeria Montti, es una escultura textil monumental que mide más de cinco metros de altura.
Montti Colque es la primera artista chilena no nacida en Chile que participa en su pabellón en la Bienal de Venecia. Ella propone entrar en un espacio “cosmonacional”, donde el visitante encontrará “un conjunto de sitios interrelacionados”. Estos diversos lugares e identidades están conectados a través de “Mamita Montaña”, la pieza central del pabellón, una instalación de naturaleza acumulativa que mide más de cinco metros de altura y que está compuesta por alfombras impresas con diversos medios, incluyendo collages, acuarelas, dibujos sobre papel, textiles impresos, piezas de cerámica y fotografías. La instalación está coronada por una cabeza de cerámica.
La artista chileno-sueca, Valeria Montti, trabaja en diversas formas de expresión, lenguajes y medios, y representa en sus instalaciones dioses, monstruos y figuras mitológicas.
“Mamita montaña” sugiere un refugio simbólico para los exiliados y los postexiliados, los refugiados, los habitantes de esta otra “comunidad imaginada” que es la nación fuera de la nación donde vive cada miembro de la diáspora. Orbitando alrededor de esta gran escultura, el pabellón chileno “Cosmonación” presentará otras nuevas obras de Montti Colque, una procesión de figuras de cerámica que representan monstruos, deidades o figuras mitológicos. Además, piezas textiles y proyecciones de video sumergirán a los visitantes en paisajes que representan una frontera simbólica donde las culturas se encuentran, se disuelven, se fusionan e hibridan.
El término “Cosmonación” es del antropólogo Michel S. Laguerre, quien afirma que las comunidades diaspóricas no rompen relaciones con sus lugares de origen sino que permanecen unidas a sus tierras ancestrales a través de diferentes maneras, materiales y prácticas espirituales. De esta manera, habitan una nación extendida, multilocalizada, una cosmonación que une territorios geográficamente distantes.