Microrrelato Ganador del Concurso Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile 2021

- Me persiguen y usted debe ayudarme, mi vida corre peligro - escuché detrás de mí, mientras abría la Embajada, una tarde oscura de enero en Zagreb.

De la penumbra salió una mujer mayor, delgada, de trazos agradables, pelo blanco descuidado y ojos azules profundos. Hablaba un correcto español, a pesar del marcado acento extranjero.

-Jamás me van a perdonar. Soy una agente alemana oriental al servicio de los soviéticos.

Fui enviada a Chile a observar el proceso.

No poseía documento de identidad, sólo innúmeras historias. Por más de una hora se refirió con extraordinaria familiaridad y coherencia a lugares de Santiago y a diversos personajes nacionales de los `70. Exigía asilo. Me pidió dinero suficiente para mantenerse modestamente en la ciudad hasta el lunes, cuando volvería con fotografías y documentos que acreditarían su relato.

Llegó el lunes, ella no. Como testimonio de su existencia dejó sólo mi curiosidad.