Museo Violeta Parra recibe legado de Ángel Parra
El material fue recopilado y ordenado por la viuda del artista, Ruth Valentin, y corresponde a 40 años de la carrera que Ángel Parra realizó desde el exilio en Francia hasta su muerte en 2017.
El material fue recopilado y ordenado por la viuda del artista, Ruth Valentin, y corresponde a 40 años de la carrera que Ángel Parra realizó desde el exilio en Francia hasta su muerte en 2017.
Esta iniciativa de la DIRAC y la Biblioteca Nacional es una exposición virtual de tarjetas postales chilenas enviadas por viajeros y residentes a mediados del siglo XX, que retrata nuestro país de Norte a Sur.
Esta iniciativa de la DIRAC y la Biblioteca Nacional es una exposición virtual de tarjetas postales chilenas enviadas por viajeros y residentes a mediados del siglo XX, que retrata nuestro país de Norte a Sur. El lanzamiento se realizará el 31 de marzo.
La muestra se exhibirá en la “Caxa Real”, ubicada en el casco antiguo de Comayagua, hasta fines de marzo.
En la inauguración participaron las Embajadas de España y Portugal, y contó con la asistencia del Viceministro de Educación y Relaciones Exteriores del país asiático, Maliki Bin Osman.
Chile estuvo representado por 525 pinturas basadas en testimonios de vecinas y vecinos de este barrio de la capital. Daniela Aravena, encargada del área de Artes Visuales y Arquitectura de la Dirección de Asuntos Culturales (DIRAC), conversó con los responsables de la muestra que se exhibirá este mes en Santiago de Chile.
La exposición será vista por alumnos y alumnas de colegios de Nueva Delhi, tanto en la embajada como en sus propios establecimientos, gracias a su carácter virtual e itinerante.
Más de dos mil placas estereoscópicas, entre positivos y negativos, conforman esta colección que retrata paisajes y escenas familiares de la primera mitad del Siglo XX. La llegada de la colección a Chile fue coordinada por la Dirección de Asuntos Culturales del Ministerio de Relaciones Exteriores y el Consulado General de Chile en Toronto, Canadá.
La UNESCO reconoció que la cultura Chinchorro momificaba sus muertos dos mil años antes que los egipcios. Así inmortalizaron a muchos miembros de la comunidad que morían prematuramente, intoxicados por el arsénico del agua.